I AM MALALA by Malala Yousafzai

Autor: Malala Yousafzai y Christina Lamb

Título en español: Yo soy Malala

Editorial inglesa: Orion

Editorial española: Alianza Editorial

Encuadernación: Tapa dura

Páginas en inglés : 320 

Páginas en español: 376

Publicación en español: 08/10/2013

SINOPSIS

Yo soy Malala, de Christina Lamb y Malala Yousafzai, es el excepcional relato de una familia desterrada por el terrorismo global, de la lucha por la educación de las niñas, de un padre que, él mismo propietario de una escuela, apoyó a su hija y la alentó a escribir y a ir al colegio, y de unos padres valientes que quieren a su hija por encima de todo en una sociedad que privilegia a los hijos varones. Yo soy Malala nos hace creer en el poder de la voz de una persona para cambiar el mundo. Malala Yousafzai se dio a conocer a los once años con un blog para el servicio en urdu de la BBC , en el que, bajo el pseudónimo Gul Makai, escribía sobre la lucha de su familia por la educación de las niñas en su comunidad. El martes 9 de octubre de 2012, con quince años de edad, estuvo a punto de pagar el gesto con su vida. Le dispararon en la cabeza a quemarropa mientras volvía a casa de la escuela en autobús, y pocos pensaron que fuera a sobrevivir. Sin embargo, la milagrosa recuperación de Malala la ha llevado en un extraordinario periplo desde un remoto valle en el norte de Pakistán hasta las Naciones Unidas en Nueva York. A los dieciséis años se ha convertido en un símbolo global de la protesta pacífica, y es la nominada más joven de la historia para el Premio Nobel de la Paz. «Los extremistas han demostrado qué es lo que más temen: a una niña con un libro.» Ban Ki-moon Secretario General de la ONU.

Como reconocimiento a su valor y a su lucha, ha recibido numerosos premios: Premio Nacional de la Paz de Pakistán en 2011, Premio Infantil Internacional de la Paz en 2013, XXV Premio Internacional Catalunya 2013. Es la persona más joven en haber sido nominada para el Premio Nobel de la Paz que ganó en 2014. Malala sigue abogando por el acceso universal a la educación a través del Malala Fund, una organización sin ánimo de lucro que apuesta por programas de gestión comunitaria y que apoya a los defensores de la educación en todo el mundo. 

Christina Lamb ha sido corresponsal en Pakistán y Afganistán desde 1987. Educada en Oxford y en Harvard, es la autora de cinco libros y ha recibido numerosos premios internacionales de periodismo. Yo soy Malala está clasificado en la materia política internacional. «Yo no hablo por mí, sino por aquellos cuya voz no puede ser oída. Aquellos que han luchado por sus derechos. Su derecho a vivir en paz. Su derecho a ser tratados con dignidad. Su derecho a la igualdad de oportunidades. Su derecho a la educación.» Malala Yousafzai Cuando los talibanes tomaron el control del valle de Swat en Pakistán, una niña alzó su voz. Malala Yousafzai se negó a ser silenciada y luchó por su derecho a la educación.

IMPRESIONES

Poco hay que añadir a la sinopsis anterior en cuanto a su argumento. Es una narración en primera persona por Malala y está dividido en 5 partes y un epílogo además de los agradecimientos y nota de Malala.

En el libro además de conocer las experiencias personales y la lucha de Malala por la paz y los derechos de las mujeres a tener una educación, también  aprenderemos algo de la historia de Pakistán, su origen y sus políticos, sobre todo en la primera y segunda parte del libro donde nos pone en situación de los cambios de gobiernos que han pasado por Pakistán y sus relaciones internacionales, y el doble juego que realizan casi todos. Además de explicarnos los cambios y el origen del conflicto en su país entre suníes y chíies. También nos muestra cuáles fueron muchas de las "absurdas" normas que instauraron los Talibanes en cuanto consiguieron el poder y las consecuencias de no cumplirlas y el código Pastún, algo que yo personalmente desconocía.

Para los pastunes la hospitalidad es muy importante, es impensable que concierten una cita para verte, se presentan en casa de un familiar y pueden estar el tiempo que consideren, aunque al anfitrión no le venga bien, nunca lo mostraría, es una falta de respeto.

No dan las gracias, piensan que un gesto amable solo puede ser devuelto con otro gesto amable, no con expresiones. "Si ayudas a alguien que lo necesita, podrás recibir una ayuda inesperada".

La venganza también está muy presente en sus vidas. Son supersticiosos. Creen que Alá escucha más atentamente a la gente mayor en sus rezos. Confían en que hay un camino para salir del peor y más peligroso de los problemas si se tiene Fé.

Malala está orgullosa de ser Pastún pero hay algunas cosas del código de conducta pastún que no comparte, particularmente el papel de la mujer.

Malala apoyada por su padre lucha por los derechos de las mujeres a tener una educación igual que los hombres tras la llegada de los talibanes al poder y que prohibieran que las mujeres asistieran a clase. Malala y su padre dieron muchas entrevistas y conferencias hablando sobre la importancia de la educación que es un regalo y organizaron marchas por la paz... Defienden que la escolarización debería ser posible para todo el mundo. Malala apoyaba sus argumentos en el mismo Corán y en lo que dijeron personas relevantes como fueron Gandhi y Jinnah, el fundador de Pakistán, que defienden la educación para todos y la fuerza de las mujeres. Los Yihadistas se escudan en el Corán para imponer sus normas, pero lo único que hacen es malinterpretarlo. Creen que si los niños leen libros o aprenden inglés se occidentalizan.

Malala y su padre fueron amenazados, pero ellos continuaron con su campaña por la paz y la educación hasta que en octubre de 2009 un hombre armado subió al autobús que llevaba a Malala a casa desde el colegio y le disparó, la bala entró por el lado del ojo izquierdo y viajó hasta quedarse alojada en el hombro. No pensaban que pudiese sobrevivir, pero milagrosamente lo consiguió y tras muchas operaciones recuperó la normalidad, aunque ahora vive con su familia en Inglaterra.

Lo que pretendían los talibanes era silenciarla y sin embargo lo que consiguieron fue hacer la campaña global.

Malala es una joven amable, tranquila, trabajadora y algo cabezona. Ella luchó, lucha y luchará por la paz y los derechos de las mujeres a obtener una educación. Su buen corazón, coraje y tenacidad son admirables. Además resulta sorprendente que después de ser disparada lo único que lamenta es no haber tenido la oportunidad de  hablar con el atacante antes de que lo hiciera. Y después de todo el sufrimiento y la peligrosa situación que se vive en Pakistán, ella echa de menos su casa, su colegio donde sus compañeros le guardan su sitio. No quiere vengarse de su atacante, no guarda rencor, solo reza por la paz y desearía poder volver algún día. Reconozcámoslo, pocos haríamos esto ni tendríamos estos sentimientos.

Me gusta la especial relación que establece con su padre, pues en una sociedad donde los chicos están mejor considerados, él apoya a su hija y confía en ella. La anima a ella y a otras niñas a que acudan al colegio en la clandestinidad, pues cree que la falta de educación es la raíz de todos los problemas en Pakistán. " Un mulá que no está completamente formado es un peligro para la Fé". "La ignorancia permite que los políticos sean gente tonta".

Aunque no todo es positivo, hay partes que me ha costado más leer como son aquellas en la que se describen muchos hechos políticos. Me perdía un poco en los detalles de que líder  prometió qué y cómo este o aquel hombre se volvieron corruptos y nunca cumplieron lo que prometieron. Y algunas veces, se mezclan las experiencias personales con hechos históricos que hacían que desconectara un poco. Sin embargo, cuando cuenta el ataque y lo que ocurrió después es más fácil de leer.

A pesar de los pequeños aspectos negativos, si te gustan este tipo de historias, que son duras pero necesario contarlas para hacernos despertar y no permanecer impasibles a lo que ocurre a nuestro alrededor, es un libro que merece la pena leer. Es un libro revelador y la historia de Malala es inspiradora y te parte el corazón. Ella nos muestra el poder de la palabra ("Los talibanes podrán quitarnos los libros y los bolis, pero no podrán parar nuestra mente") y que si se quiere algo se debe persistir ("Si quieres conseguir un objetivo, habrá obstáculos en el camino, pero debes continuar"). Tuvo un sorprendente efecto en el mundo.

Este libro nos invita a reflexionar sobre nuestras propias vidas y creencias. Nos recuerda que tenemos muchas cosas que agradecer como es la libertad de expresión, de religión, la libertad de poder ir de compras sola sin necesidad de ir escoltado por un hombre y la posibilidad de tener acceso a la educación, sin importar el sexo.